Proteger los centros de datos contra amenazas internas se ha convertido en una preocupación crítica, ya que las violaciones de datos y las amenazas a la seguridad no sólo se originan externamente, sino que se perpetúan cada vez más desde adentro. Las soluciones modernas de control de acceso han evolucionado significativamente, incorporando tecnologías sofisticadas diseñadas para abordar y mitigar estos riesgos.
Al aprovechar los sistemas biométricos avanzados, la autenticación continua y el análisis de comportamiento, estas soluciones mejoran el marco de seguridad de los centros de datos, garantizando que solo el personal autorizado pueda acceder a la infraestructura y a los datos confidenciales.
Tradicionalmente, los sistemas de control de acceso se han basado en métodos como tarjetas de acceso y PIN para asegurar el acceso a espacios físicos y digitales. Sin embargo, estas medidas a menudo resultan insuficientes cuando se trata de prevenir amenazas internas. Las tecnologías modernas han revolucionado este panorama mediante la integración de la verificación biométrica y los controles de acceso basados en roles.
La tecnología biométrica, que incluye sistemas de reconocimiento facial y de huellas dactilares, garantiza que el acceso se conceda en función de rasgos físicos, que son casi imposibles de replicar o falsificar. Este método reduce significativamente el riesgo de acceso no autorizado por parte de personas internas que, de otro modo, podrían adquirir las formas tradicionales de credenciales de entrada.
Cuando se combina con la autorización basada en roles, que adapta los privilegios de acceso a los roles y responsabilidades específicos de los empleados individuales, se crea un entorno más seguro. Este enfoque dual no solo restringe la entrada a áreas sensibles, sino que también hace cumplir el principio de privilegio mínimo, asegurando que los empleados tengan acceso sólo a la información necesaria para sus funciones laborales.
"En el control de acceso, la integración de la biometría y la autorización basada en roles mejora significativamente la seguridad contra amenazas internas", dijo Hanchul Kim, CEO de Suprema. “El uso de tecnologías biométricas tanto para la entrada física como para el acceso al sistema garantiza que solo el personal autorizado pueda acceder. Combinar esto con la autorización basada en roles, que asigna niveles de acceso basados en roles y responsabilidades específicas, crea un marco de seguridad sólido”.
Este enfoque no solo restringe el acceso a áreas y datos confidenciales, sino que también aplica el principio de privilegio mínimo, garantizando que los empleados solo puedan acceder a la información necesaria para sus funciones laborales. Juntas, estas estrategias forman una defensa de múltiples capas que mitiga el riesgo de acceso no autorizado y mantiene la integridad de los sistemas y datos críticos.
Para reforzar aún más las medidas de seguridad, algunas empresas han implementado sistemas de autenticación continua. Estos sistemas verifican continuamente la identidad de las personas mientras interactúan con los recursos del centro de datos, en lugar de depender de un único punto de control de entrada. Este método garantiza que cualquier anomalía o desviación del comportamiento normal se detecte en tiempo real, evitando así que se produzcan posibles violaciones de seguridad.
Además, ahora se emplean análisis de comportamiento para monitorear y analizar el comportamiento de los usuarios de forma continua. Estos sistemas utilizan algoritmos para detectar patrones inusuales en el acceso y el uso, lo que podría indicar una posible amenaza interna. Al integrar aportaciones de varios departamentos como Recursos Humanos y Finanzas, estas herramientas pueden asignar puntuaciones de riesgo a titulares de tarjetas individuales, señalando cualquier actividad sospechosa para una mayor investigación.
"Algunas empresas han desarrollado herramientas de análisis o inteligencia empresarial para detectar e informar comportamientos anormales y actividad de tarjetas para detectar posibles amenazas internas", dijo Gaoping Xiao, Director de Ventas para APAC de AMAG Technology. "El algoritmo puede determinar la puntuación de riesgo de un titular de tarjeta en función de las actividades de la tarjeta, el perfil del titular y otros factores como aportaciones de Recursos Humanos o Finanzas, etc."
La adopción de estas medidas avanzadas de control de acceso requiere una planificación e implementación cuidadosas. Los centros de datos deben evaluar su postura de seguridad actual, identificar vulnerabilidades potenciales y determinar las tecnologías apropiadas que se alineen con sus necesidades de seguridad específicas.
Esto implica no sólo la integración de nuevas tecnologías, sino también la capacitación del personal para comprender y gestionar eficazmente estos sistemas.
Evaluación integral de riesgos: Antes de implementar nuevas tecnologías de control de acceso, es fundamental realizar una evaluación de riesgos exhaustiva. Esto ayuda a identificar áreas específicas donde podrían surgir amenazas internas y a adaptar las soluciones de control de acceso para abordar estos riesgos.
Colaboración interdepartamental: La colaboración entre seguridad, TI, recursos humanos y otros departamentos relevantes garantiza que todos los aspectos de las amenazas internas se aborden de manera integral. Al compartir información y conocimientos, las organizaciones pueden identificar mejor las amenazas potenciales y responder de manera más efectiva.
Seguimiento y evaluación continuos: La eficacia de los sistemas de control de acceso debe monitorearse y evaluarse continuamente para garantizar que funcionen según lo previsto. Las auditorías periódicas y las actualizaciones del sistema a medida que evolucionan las tecnologías también son cruciales para mantener un alto nivel de seguridad.
Dado que los centros de datos siguen siendo los principales objetivos de las amenazas internas, no se puede subestimar la importancia de los sistemas sofisticados de control de acceso.
Al integrar tecnologías biométricas, autenticación continua y análisis de comportamiento, las organizaciones pueden crear un marco de seguridad sólido que no solo evite el acceso no autorizado, sino que también garantice la integridad y confidencialidad de los datos críticos.
A medida que avancemos, estas tecnologías desempeñarán un papel cada vez más vital en la protección de los activos que impulsan nuestro mundo digital.
Fuente: asmag.com